jueves, 1 de julio de 2010

Y me despedí...

O al menos lo ensayé. Fue una improvisada despedida de mis alumnos, entrenándome por si finalmente fuera yo el escogido para pasar el año sabático en La Rioja.

Antes hubo tiempo para rellenar un cuestionario en el que quedaron muchas cosas que decir:

¿Cómo poder explicar cuál es tu vino favorito sin perderte en variedades, colores o texturas, o mucho más en momentos u ocasiones tan variadas como una cena romántica o una fiesta de celebración...

¿Cómo explicar por qué "En la cabeza de Steve Jobs" es el último libro que he leído y tengo en la cabecera de mi cama "Smart mobs", "Twitterville" y "Quién fuera Dios"?...

¿Cómo añadir más al verbo "Disfrutar" cuando se me pregunta "Hablar en público te supone"...

Y qué decir de la entrevista. Apenas 5 minutos de charla apresurada en la que saltamos de mis clases a mi programa de radio, pasando por el mundo de los blogs y el Social Media. Muchas cosas quedaron en el tintero, que te vienen a la cabeza al minuto de franquear la puerta y que te hace pensar, "ains, se me olvidó esto, o aquello, por qué habré actuado así, ¿y si hubiera respondido asá?"...




600 personas con anhelos y sueños en la cabeza. 600 personas que miran el mapa de La Rioja como nunca lo habían mirado antes. Que sueñan con descubrir parajes en los que tal vez jamás habían reparado. 600 personas que paladean una ilusión sabedores de que solo uno podrá vivirla completamente.

Da igual, pase lo que pase, 600 personas hemos tenido nuestra pequeña esperanza durante unos minutos. Y seamos o no los elegidos, a partir de ahora La Rioja tendrá un significado completamente distinto.

Y mientras tanto... ¿seguimos ensayando despedidas?...

0 comentarios:

Publicar un comentario