Deseo escribir un libro que analice cómo los niños están utilizando la tecnología e Internet para mejorar su proceso de aprendizaje. Es cierto que en los entornos urbanos el acceso a Internet ya es algo generalizado y los chavales lo han incorporado en su día a día como algo absolutamente lógico y normal. Pero ¿qué ocurre en entornos de carácter más rural? ¿Cómo afecta a las familias, a padres y a abuelos la nueva forma de aprender de los chicos? ¿Qué supone para pequeños pueblos la llegada de las nuevas generaciones digitales? ¿Cómo van a influir en la prosperidad y en el cambio del paisaje social? ¿Y los maestros y profesores? ¿Qué roles van a jugar en este proceso? ¿A qué dificultades se enfrentan y cómo las están solucionando?
Muchas preguntas que intentaría contestar durante ese año, viajando, entrevistándome con los protagonistas de un experimento que tal vez arrancase en una comunidad autónoma y saltase posteriormente al resto del estado, o incluso rompiera fronteras y me llevara alrededor del mundo: Educación, tecnología, tradición, modernidad, nuestro futuro, en definitiva.
¿Podré llegar a conseguirlo? Un proyecto de esas características necesita de un patrocinador, o tal vez de tener los arrojos suficientes como para lanzarse a él y pensar más adelante en la financiación. Pero mientras llega, seguiré manteniendo este blog como espacio en el que mezclaré los contenidos educativos con mis experiencias viajeras. Una mezcla extraña sin duda, pero no más extraña que yo mismo.
